Sunday, November 26, 2023

Napoleón (Napoleon)


Síntomas: Durante el caos social y político que dejó la revolución francesa de 1789, un joven oficial llamado Napoleón Bonaparte (Joaquin Phoenix) empieza a destacar con audaces estrategias y victorias militares que eventualmente lo llevarán al máximo cargo de la nación.

Diagnóstico: Francamente, no hubiera gastado dos horas y media viendo Napoleón en el cine, si hubiera sabido que la "versión del director" de cuatro horas se estrenará próximamente en Apple+. Sin embargo, eso explica parcialmente el problema principal de la película: una trama modular con escenas individualmente interesantes, pero desconectadas entre sí, de modo que nunca sentí la progresión dramática que debería sustentar una buena historia. En otras palabras, Napoleón no se siente como una biografía integral, sino como un anecdotario superficial a pesar de su opulenta producción (sobre todo durante la primera mitad, donde se acumula el drama familiar y la intriga política). Tal vez la "versión del director" encontrará esas conexiones faltantes para restaurar el flujo narrativo y otorgarle a Napoleón el auténtico calificativo de "obra maestra"... pero no me interesa averiguarlo.
Y ahora, con las quejas fuera del camino, puedo dedicarme a elogiar la increíble dirección de Ridley Scott y su gloriosa visión para crear algunas de las mejores secuencias bélicas que he visto en mi vida, no necesariamente por su tamaño (aunque desde luego son monumentales), sino por la impresionante atención al detalle, el impecable lenguaje cinematográfico, y la variedad de técnicas conjugadas para crear auténtico "cinema" a escala épica (del que le gusta a Scorsese). En serio, si alguien quiere ver Napoleón solo por las escenas de batalla, por favor ignoren mis quejas sobre su estructura, y disfruten la película en un cine con gran pantalla y buen sonido (difícil en México, pero les deseo buena suerte). Eso dejará satisfecho a un buen porcentaje del público, y hasta contribuirá al éxito económico de la película, lo cual no tiene nada de malo.
Otro aspecto positivo fueron las actuaciones, algunas mejores que otras, pero todas enfocadas en revelar la esencia de los personajes. Por ejemplo, Vanessa Kirby no me pareció adecuada para interpretar a Joséphine de Beauharnais, la esposa de Napoleón; pero esa misma "incompatibilidad" subraya la diferencia fundamental de temperamento y actitud que hizo tan volátil su relación. También me gustó el trabajo de Tahar Rahim, Rupert Everett y Paul Rhys (entre otros), pues representan divergentes ideologías de un gobierno en franca transición, tratando de superar los vicios de la monarquía, tan solo para caer en otro sistema totalitario basado en los caprichos de un excéntrico líder.
Lo cual nos lleva a Joaquin Phoenix y su compleja versión de Napoleón, feroz guerrero y brillante estratega, pero con limitaciones e inseguridades que hubieran descarrilado la carrera de cualquier político convencional.
Y creo que ese fue el punto de Napoleón... no solo el recuento de sus triunfos militares y la refutación de los clichés históricos (desde su baja estatura hasta el proverbial caballo... una escena que casi me arruinó la película), sino el análisis de un individuo cuyo talento para la guerra lo llevó a esferas de poder donde las cosas ya no podían resolverse con sablazos ni artillería. Si tan solo el guionista David Scarpa (¿y tal vez la editora Claire Simpson?) hubieran forjado enlaces más robustos entre ambas facetas de la película (el lado humano y el militar), creo que Napoleón estaría entre las mejores obras de Ridley Scott. Pero, como dije, tan solo el espectáculo visual y el trabajo de Joaquin Phoenix justifican una sincera recomendación... aunque no fue suficiente para convencerme de ver la versión más larga en video casero. En esas cuatro horas podría ver dos películas de Ridley Scott que me gustan más y me frustran menos.
Calificación: 8.5

IMDb

Friday, November 24, 2023

Historias Satánicas (Satanic Hispanics)


Síntomas: Durante un interrogatorio policíaco en la ciudad de El Paso, el sobreviviente de una masacre de inmigrantes relata terroríficas historias sobre algunas de las víctimas.

Diagnóstico: Apenas alcancé a ver Historias Satánicas durante su breve estancia en cines de mi país; y aunque tiene las imperfecciones naturales de cualquier antología, siento que su intención y diversidad merecen la atención de los devotos del Horror decepcionados por la falta de representación latina en nuestro género favorito.
Habiendo dicho eso, veamos si Historias Satánicas funciona como simple película de terror.
La historia envolvente es "El Viajero", dirigida por Mike Méndez (Big Ass Spider!, Don't Kill It): Dos policías (Greg Grunberg y Sonya Eddy, a quien está dedicada la película) interrogan al sobreviviente de una caravana de inmigrantes que intentaba entrar en los Estados Unidos. Entonces el hombre cuenta historias que escuchó de sus compañeros de viaje.
"También Lo Vi", de Demián Rugna (Aterrados, Cuando Acecha la Maldad): El joven Gustavo (Demián Salomón) cree que puede invocar una presencia sobrenatural en la casa de su abuela, y llama al productor de un podcast para que presencie el fenómeno. El mejor segmento de la película, en mi humilde opinión, con la clásica mezcla de drama, sangre y suspenso que caracteriza la obra de este brillante cineasta argentino. Desafortunadamente el final se desinfla y no cumple la promesa del tremendo desarrollo.
"El Vampiro", de Eduardo Sánchez (The Blair Witch Project, Exists): Un anciano (Hemky Madera) aprovecha la noche de Halloween para convivir con la población local... y beber su sangre impunemente, pues nadie sospecha que es un vampiro de verdad. El cortometraje empieza como comedia "meta" sobre los clichés del mito vampírico (particularmente la versión original de Drácula), pero adquiere un sincero núcleo emocional al mostrarnos al humano detrás de los colmillos. Mi única queja es que el humor cruza ocasionalmente la línea de la caricatura.
"Nahuales", de Gigi Saul Guerrero (V/H/S/85, Bingo Hell): Un informante de la CIA (Ari Gallegos) quiere escapar de México antes de que lo encuentren los narcotraficantes que lo persiguen... pero el auténtico peligro no son los sicarios de Catemaco, sino algo más místico y mortal. Me gustó la premisa, la pesadillesca atmósfera, y el provocativo retrato de una intrigante leyenda mexicana. Lo único que faltó fue una historia con principio y final para conectar las virtudes del corto. La visión creativa de Gigi Saúl Guerrero sigue evolucionando, pero aún sufre los problemas narrativos de sus obras previas.
"The Hammer of Zanzibar", de Alejandro Brugués (Juan of the Dead, Nightmare Cinema): Varios jóvenes graban un ritual secreto en Cuba y liberan un demonio que no se detendrá hasta exterminarlos, a menos que obtengan el arma mágica que podría derrotarlo. Otra mediana "comedia de terror" que a veces pierde el equilibrio entre sus contradictorios extremos, aunque la rescata el carisma del reparto que incluye a Jonah Ray Rodrigues (Christmas Bloody Christmas), Jacob Vargas (Beyond Skyline) y Christian Rodrigo.
Y finalmente regresamos a la historia envolvente, donde el misterioso Viajero (Efrén Ramírez) revela al culpable de los asesinatos... y advierte que ocurrirá lo mismo en la estación de Policía, a menos que lo dejen ir. Pero desde luego nadie le cree, hasta que es demasiado tarde. Mike Méndez compensa la lentitud del principio con un contundente final repleto de sangre, violencia, y efectos del legendario Norman Cabrera (Malignant, Scary Stories to Tell in the Dark). Buen remate de una antología con algunos problemas, pero a fin de cuentas recomendable por sus valores intrínsecos, así como por su relevancia cultural. Ojalá tenga suficiente éxito para convertirla en franquicia, pues cada vez hay más directores latinos que merecen exposición internacional. Algunas recomendaciones para la hipotética secuela: Guillermo Amoedo (El Habitante), Adrián García Bogliano (Ahí Va el Diablo) y Michelle Garza Cervera (Huesera).
Calificación: 8

IMDb

Sunday, November 19, 2023

Los Juegos del Hambre: Balada de Pájaros Cantores y Serpientes (The Hunger Games: The Ballad of Songbirds & Snakes)


Síntomas: Durante el décimo torneo de Los Juegos del Hambre, el joven Coriolanus Snow (Tom Blyth) es elegido como mentor de la "tributo" Lucy Gray Baird (Rachel Zegler), y aprende algunas duras lecciones sobre responsabilidad personal y la corrupción del poder.

Diagnóstico: En verdad lo intenté. A pesar de mi antipatía por The Hunger Games (me refiero a las películas; nunca leí los libros ni me interesa hacerlo, y por lo tanto mi evaluación será exclusivamente sobre la experiencia cinematográfica), hice un genuino esfuerzo por ver Los Juegos del Hambre: Balada de Pájaros Cantores y Serpientes con la mente abierta y sin tratar de compararla con la saga de Katniss Everdeen. Solo una nueva aventura en el distópico mundo de "Panem", donde la represión política y la arrogancia de la élite económica condujo a la sanguinaria competencia entre distritos. Desafortunadamente esa actitud neutral no me ayudó a disfrutar la película.
La trama de Los Juegos del Hambre: Balada de Pájaros Cantores y Serpientes se ubica sesenta años antes de los eventos retratados en The Hunger Games y sus secuelas, y se enfoca en la juventud de Coriolanus Snow (Tom Blyth), el personaje interpretado por Donald Sutherland en aquellas películas.
Sin embargo, al principio de Los Juegos del Hambre: Balada de Pájaros Cantores y Serpientes, Coriolanus es un ambicioso joven que quiere restaurar la gloria de su aristocrática familia, venida a menos desde la muerte de su padre. Entonces Coriolanus es elegido como "mentor" de Lucy Gray Baird (Rachel Zegler), competidora (o "tributo") en Los Juegos del Hambre que se volvió popular por sus canciones de protesta (el metafórico "pájaro cantor" del título). Y, desde luego, durante el entrenamiento Lucy y Coriolanus desarrollan una relación que podría cambiar el futuro de Panem (sigo sin entender si es el futuro de la Tierra, u otro planeta, o un "typo" que la autora Suzanne Collins olvidó corregir).
Pero... ¡un momento! Los Juegos del Hambre solo ocupan la mitad de la película, reservando el resto para más romance, más canciones, y más intriga donde Nada Es Lo Que Parece©, excepto que todo ocurre exactamente como esperamos, desde las "sorpresivas" muertes de personajes secundarios, hasta los "deus ex machina" que el director Francis Lawrence (Red Sparrow, The Hunger Games: Catching Fire) utiliza para generar melodrama sin esforzarse demasiado. Y ahí es donde intervienen las serpientes literales del título. No diré más.
Hablando de serpientes, el reparto joven se siente tan insulso como el libreto; y por el lado de los villanos tenemos desorbitadas actuaciones de Viola Davis como Volumnia Gaul, manipuladora sin escrúpulos; el gran Peter Dinklage como Casca Highbottom, arquitecto de los Juegos del Hambre; y Jason Schwartzman como Lucky Flickerman, el odioso Maestro de Ceremonias. Al menos ellos se divirtieron con esta inexplicable precuela (¿realmente alguien quería conocer el origen del villano?)
Por el lado positivo... podría mencionar los valores técnicos, pero me costó trabajo apreciar los efectos, música y cinematografía en un contexto tan flojo y desangelado. Las películas de The Hunger Games tenían el arma secreta de Jennifer Lawrence; pero Los Juegos del Hambre: Balada de Pájaros Cantores y Serpientes nos obliga a pasar casi tres horas con personajes planos y conflicto sin emoción. Afortunadamente los fans del libro parecen estar contentos con la película, lo cual me alegra. Pero en lo personal creo que hice mi última visita al reino de Panem; prefiero distopias que no me pongan a dormir.
Calificación: 6 (solo por la voz de Rachel Zegler)

IMDb

Friday, November 17, 2023

Elevator Game


Síntomas: Después de filmar el "Reto del Elevador" para su canal de YouTube, varios jóvenes sufren los ataques de una entidad paranormal.

Diagnóstico: Sí, yo también estoy cansado de películas sobre "influencers", "follows" y "likes"; sin embargo, Elevator Game fue dirigida por Rebekah McKendry, cuya considerable experiencia en el lado "intelectual" del Horror (escribió para Fangoria, contribuyó a múltiples podcasts, y da clases de cine en la Universidad del Sur de California, por no mencionar que dirigió Glorious y All the Creatures Were Stirring) me hizo pensar que encontraría un ángulo original en la vieja receta de "jóvenes perseguidos por un fantasma vengativo (o demonio, o leyenda urbana, o lo que sea)". Desafortunadamente Elevator Game degenera en los mismos clichés de siempre, y no sabe aprovechar su intrigante premisa.
El epónimo "juego del elevador" es uno de esos "retos" tan populares en las redes sociales, y consiste en subirse a un elevador, oprimir los botones en una secuencia específica, y esperar que aparezca un espectro en el quinto piso. Entonces varios jóvenes filman el reto para su canal de YouTube, pero no siguen las reglas... y la entidad empieza a perseguirlos.
Lo mejor de Elevator Game fue el prólogo, donde vemos a una joven realizar el reto con trágicas consecuencias. Es prácticamente un cortometraje por sí mismo, repleto de suspenso, atmósfera y momentos escalofriantes. Lamentablemente Elevator Game nunca recobra esa intensidad durante su torpe desarrollo, enfocado en los miembros del equipo "Nightmare on Dare Street", y los genéricos conflictos que ocupan el tiempo entre manifestaciones sobrenaturales.
Por el lado positivo, me gustó la mecánica del "reto" y las siniestras posibilidades del elevador maldito, un concepto relativamente común en el cine de terror, pero replanteado por McKendry en un contexto que podríamos describir como "lovecraftiano". Más allá del fantasma vengativo, el elevador es un portal hacia otras dimensiones, lo cual restauró parcialmente mi atención y enriqueció la narrativa durante la segunda mitad de la película. Y cuando añadimos algunas muertes sangrientas y revelaciones sorpresivas (obviamente hay una tragedia del pasado conectada con los horrores del presente), tenemos como resultado una película indudablemente mediocre, pero nunca aburrida, y con sólidos valores en todos los aspectos de su producción, desde la excelente cinematografía nocturna, hasta los esporádicos efectos especiales.
Lo mejor que puedo decir sobre Elevator Game es que Rebekah McKendry sigue evolucionando como directora, y se nota la expansión de su visión creativa conforme explora historias más complejas y ambiciosas. Sin embargo (igual que ocurre con muchos cineastas "indie"), su punto débil está en los libretos, y en la dificultad de mantener el balance entre horror, emoción y drama. Ese es el auténtico "reto" que deberían resolver los directores modernos, en vez de copiar las efímeras modas de las redes sociales para atraer al público joven. O tal vez me estoy aferrando a un medio obsoleto que pronto será reemplazado por videos verticales de quince segundos. En fin, ya será un problema para la siguiente generación.
Calificación: 6

IMDb

Wednesday, November 15, 2023

Scooby Doo! and Krypto, Too!


Síntomas: La Liga de la Justicia desapareció; los villanos de Metrópolis están destruyendo la ciudad; y un fantasma se apoderó del Salón de la Justicia. Afortunadamente Jimmy Olsen (voz de James Arnold Taylor) conoce a los jóvenes de Mystery, Inc., y les pide ayuda para resolver el misterio.

Diagnóstico: La franquicia de Scooby Doo se adaptó a las mareas culturales del siglo veintiuno con una serie de "crossovers" incongruentes en papel (Batman, Kiss, Elvira), pero divertidos en ejecución, gracias a que respetaron la esencia de sus respectivos Universos y ofrecieron algo nuevo el público multi-generacional. O tal vez estoy imaginando motivos artísticos detrás de la avaricia corporativa del estudio Warner Bros., poseedor de tantas "propiedades intelectuales" que no sabía qué hacer con ellas, y por eso decidió combinar ingredientes como un chef psicópata, para ver cuáles recetas funcionan y cuáles envenenan a sus comensales. O algo así. El punto es que Scooby Doo! and Krypto, Too! me pareció una sólida idea que combina a los perros más famosos de sus respectivas mitologías. Desafortunadamente el resultado no cumplió su potencial por culpa de un libreto que no encontró suficientes conexiones entre los misterios de Mystery, Inc. y las aventuras de la Liga de la Justicia.
Dentro de lo bueno mencionaría la excusa para llevar a Scooby Doo (voz de Frank Welker), Shaggy (voz de Matthew Lillard), Fred (voz de Fred Welker), Daphne (voz de Grey Griffin), y Velma (voz de Kate Micucci) a la ciudad de Metrópolis, donde la reportera Lois Lane (voz de Tara Strong) y el fotógrafo Jimmy Olsen (voz de James Arnold Taylor) investigan la desaparición de la Liga de la Justicia, así como el fantasma que tomó posesión del Salón de la Justicia. Y, por suerte, la pandilla recibirá ayuda del súper-perro Krypto, quien fue testigo de los extraños eventos.
La interacción de los personajes es simpática y "realista" dentro de su inherente ridiculez. Este grupo de actores lleva años interpretando a los miembros de Mystery, Inc. (algunos más que otros... ¡Frank Welker empezó hace más de cincuenta años!), y saben expresar las emociones que la animación no siempre logra transmitir (por ejemplo, los celos que surgen entre Fred y Daphne por la presencia de un antiguo novio). Las voces invitadas también hacen un buen trabajo, destacando Charles Halford como un villano con buenos momentos cómicos por su desdén hacia los jóvenes entrometidos que interfieren con sus planes... aunque eventualmente descubrirá que no son tan ineptos como parecen.
Por el lado negativo... esta vez los apócrifos "fantasmas", las persecuciones por la "casa embrujada" (el Salón de la Justicia), y las previsibles explicaciones (sí, otra vez hologramas) se sienten fuera de lugar en el contexto de DC Comics. Tampoco ayuda que el argumento de Scooby Doo! and Krypto, Too! se parezca tanto al de DC League of Super-Pets, la cual me gustó más. Y cuando la directora Cecilia Aranovich Hamilton (egresada de la aclamada serie Harley Quinn) remata el tercer acto con una pelea de robots gigantes, ya no se siente como una película de Scooby Doo, sino como un viejo episodio de Super Friends escrito bajo la influencia de alguna droga setentera.
Lo cual, para ser honestos, no es tan malo como suena; sólo menos ingenioso que las colaboraciones mencionadas al principio. Habiendo dicho eso, espero que Scooby Doo! and Krypto, Too! sea un tropiezo temporal, y que la pandilla de Mystery, Inc. regrese pronto con más exóticos "crossovers" (dentro del inmenso catálogo de Warner Bros.) para construir puentes entre "fandoms" aparentemente incompatibles. Sugerencia del día: Scooby Doo en el universo de Veronica Mars. No habrá fantasmas en el pueblo de Neptune, pero abundan los esqueletos en el closet.
Calificación: 6.5

IMDb

Sunday, November 12, 2023

The Killer


Síntomas: Después de fallar en su más reciente misión, el Asesino (Michael Fassbender) deberá utilizar todo su ingenio para neutralizar a los individuos enviados por sus jefes para corregir el error.

Diagnóstico: Así es, uno de los más populares argumentos del cine B, pero realizado con la visión artística y pericia técnica de David Fincher, por no mencionar los amplios bolsillos de Netflix para garantizar la máxima calidad posible en todos los aspectos de la producción, desde la cinematografía de Erik Messerschmidt, hasta la truculenta música de Trent Reznor y Atticus Ross. Ah, y también están las canciones de The Smiths que el Asesino (Michael Fassbender) escucha constantemente para "relajarse" mientras trata de sobrevivir las consecuencias de su error (y no solo utilizaron grandes éxitos como How Soon is Now o Girlfriend in a Coma, sino que revivieron "deep cuts" que jamás esperé escuchar en un proyecto de alto perfil; tan solo con lo que gastó Netflix en la banda sonora, podrían haber financiado diez películas de "asesino en fuga" dirigidas por Jesse V. Johnson o John Hyams).
A pesar de esos antecedentes, conviene aclarar que The Killer (sin relación alguna con la clásica de John Woo) no es realmente una película de acción, sino un thriller analítico y cerebral enfocado en la metodología del Asesino, basada en estrictas reglas que le ayudaron a ganar excelente reputación en el mundo criminal (o algo así... la película no es muy clara sobre la organización que lo controla, pero claramente existe un código de conducta y "garantías" para proteger a los clientes que contratan sus servicios). Esto significa que hay poca violencia en The Killer, pero Fincher la compensa con virtuosos niveles de tensión y un hipnótico estilo visual integrado por colores fríos y encuadres precisos que reflejan el temperamento del Asesino.
Y, desde luego, la alquimia cinemática no funcionaría sin el otro ingrediente de la poción: la extraordinaria actuación de Michael Fassbender, casi muda pero enormemente expresiva gracias a su talento para transmitir emociones sin mover un músculo. En otras palabras, no hay que esperar una copia de John Wick, sino algo más cercano a "David", el cínico androide de Prometheus... pero con menos sarcasmo.
De hecho, mi única queja sobre The Killer sería el pretencioso "voice over" que nos acompaña de principio a fin. La película está basada en un comic (de Matz y Luc Jacamon), un medio donde la narración es indispensable para "llenar los huecos" y compartir el pensamiento de los personajes. Sin embargo Fassbender es tan bueno en su oficio que la narración me pareció una distracción redundante que rara vez contribuye al significado de las escenas. Cuando mucho la hubieran usado para enumerar las reglas del Asesino, y para reiterarlas cuando fuera necesario para justificar su conducta. Por lo demás, el rostro y lenguaje corporal del actor se encargan de decirnos lo que necesitamos saber sobre el personaje. Incluso diría que los mejores momentos de The Killer (en mi humilde opinión) son aquellos donde alguien más está hablando (por ejemplo Tilda Swinton, Charles Parnell, o Gabriel Polanco), y Fassbender simplemente escucha, evaluando la situación y calculando su siguiente paso.
Fuera de eso, The Killer me gustó mucho y podría estar entre mis favoritas de David Fincher, no solo por elevar una clásica premisa de las B-Movies, sino porque se presenta como simple entretenimiento de impecable manufactura, sin expectativas de gloria ni ambiciones comerciales. Probablemente nadie ganará Óscares por The Killer... pero no me había divertido tanto con una obra de Fincher desde Alien³. Y además aquí el perrito sobrevive.
Calificación: 9

IMDb

Saturday, November 11, 2023

The Marvels


Síntomas: Carol Danvers (Brie Larson) cumplió su promesa de destruir la Inteligencia Suprema que controlaba la sociedad Kree; pero sus buenas intenciones tuvieron consecuencias inesperadas que ahora deberá enfrentar con ayuda de sus nuevas aliadas, Monica Rambeau (Teyonah Parris) y Kamala Khan (Iman Vellani), más conocida como Ms. Marvel.

Diagnóstico: No lo voy a negar: las películas de Marvel decayeron considerablemente desde el gran final de la Fase III (la conclusión de Infinity Gauntlet).
Supongo que era natural esperar un descenso en calidad después de quince años y treinta y tres películas (!). La mitología se complicó demasiado, los personajes perdieron definición, y la consolidación del Universo terminó volviéndolo monótono, no solo en el aspecto visual (la "fatiga digital" de incontables batallas intercambiables), sino por el tono blando y genérico de la narrativa, dictado por sinergia corporativa que sofocaba cualquier amago de visión personal (con algunas excepciones). Y, bueno, mejor ni hablar del mediocre sub-universo televisivo, que solo enredó más la continuidad y desperdició recursos en apáticas expansiones de personajes menores (con algunas excepciones) (cada quién elija su propia "excepción").
Y ahora, después de un merecido descanso, se estrena The Marvels, la secuela de Captain Marvel. ¿Ofrecerá una mejoría, o será otro clavo en la tumba del otrora infalible estudio?
Me inclino por lo primero, pero el tiempo dirá si fue lo segundo.
Para bien o para mal, todos los problemas antes mencionados siguen presentes en The Marvels. Sin embargo hay algo en su tono, en su sentido del humor, en su eficiente ejecución, que me inspiró esperanzas por el futuro de la franquicia. Y creo que podría atribuirlo a la excelente química del reparto, y a la dirección de Nia DaCosta (Candyman), quien maneja con igual soltura los aspectos dramáticos de la historia y el espectáculo súper-heroico, con un saludable aderezo humorístico para recordarnos que no debemos tomar muy en serio la película.
La trama... no voy a perder tiempo en repetirla, pero me pareció lógica y bien estructurada para cubrir los múltiples requerimientos de una película de Marvel: un poco de conflicto (las protagonistas tienen inseguridades y temores que obstaculizan su misión); valiosas lecciones de vida (hasta Nick Fury aprende algo nuevo); y sub-tramas que amplifican el melodrama y preparan el camino para futuras secuelas (por cierto, me gustaron mucho las dos escenas post-créditos, justamente por la promesa de nuevos rincones de Marvel que podrían sacudir el polvo de la complacencia y la repetición).
No diría que las actuaciones son "buenas", pero expresan con elocuencia las emociones que motivan al trío de "maravillas": Carol Danvers (Brie Larson) aprendió mucho como defensora interplanetaria, pero aún puede cometer errores que la hacen dudar de su habilidad y sentido común. Monica Rambeau (Teyonah Parris) guarda resentimiento contra Danvers por su ausencia en difíciles momentos de su vida (algunos de los cuales se mostraron en la serie WandaVision); y Kamala Khan (Iman Vellani) es una clásica "fangirl" tratando de contener su entusiasmo y comportarse a la altura de la situación. La interacción de las actrices genera los mejores momentos de The Marvels, y fue lo que permaneció en mi memoria al terminar la película. Como siempre, las batallas cósmicas y los efectos especiales son entretenidos, pero ya los vimos muchas veces como para inspirar auténtica emoción.
Pensándolo bien, The Marvels me gustó por los personajes y el humor (hay una referencia musical a una de las peores películas del mundo que me arrancó una genuina carcajada); pero lo mejor fue que se atrevió a intentar cosas nuevas, rompiendo las reglas para encontrar su voz. Y aunque no todas las tangentes funcionan (como la secuencia estilo Bollywood), al menos anuncian una nueva actitud que podría extender la longevidad de la saga y restaurar la fe de los fans (como yo). En resumen: dudo mucho que regresemos a la "Era Dorada" de Winter Soldier e Infinity War; pero aún hay oportunidad para salvar a Marvel del estancamiento creativo. O también podemos olvidar todo el asunto, y esperar veinte años para los re-makes.
Calificación: 8

IMDb

Friday, November 10, 2023

Boudica: Queen of War


Síntomas: En el año 61 A.D., la Reina Boudica (Olga Kurylenko) unifica a las tribus celtas para combatir a las invasores romanos que quieren conquistar Britannia.

Diagnóstico: No voy a decir que Olga Kurylenko nació para interpretar a la reina guerrera Boudica, pues su talento es más amplio y variado; pero su actuación en Boudica: Queen of War está entre las mejores de su carrera, y por sí sola eleva la película y compensa parcialmente sus limitaciones técnicas.
Como cualquier épica histórica, Boudica: Queen of War embellece y condensa los "hechos reales" (ya de por sí cuestionables por su antigüedad y contaminación cultural); pero el director y guionista Jesse Johnson merece aplauso por pintar un retrato razonablemente fiel de la invasión romana en Britannia, tanto en sus factores externos (los caprichos del Emperador Nerón que indirectamente contribuyeron al levantamiento de Boudica) como internos (la precaria relación de las tribus británicas)... todo lo cual es una manera amable de decir que Boudica: Queen of War a veces se "clava" tanto en los detalles que pierde el hilo de la narrativa; sin embargo, ahí es donde intervienen las actuaciones y la dirección de Johnson para recobrar el rumbo y ubicar las aventuras de la Reina en un contexto más rico y satisfactorio que cualquier genérica cinta de acción.
Hablando de lo cual, otro problema del rigor histórico es que tampoco hay mucha acción en Boudica: Queen of War... o al menos no tanta como esperarían los fans de Jesse Johnson que han seguido su carrera desde "stunt man" hasta director de modestas "joyas ocultas" del Cine B, como Avengement, Triple Threat y Accident Man. Puedo afirmar con confianza que Boudica: Queen of War es el trabajo más maduro y ambicioso de Johnson, con una fascinante propuesta sobre la motivación de su heroína. Sin revelar demasiado, diré que Boudica (Olga Kurylenko) empieza como refinada consorte de un gobernante local, hasta que una tragedia destruye su felicidad y la obliga a participar en una guerra que nunca deseó... auxiliada por misteriosos aliados de posible origen sobrenatural.
Al principio me pareció un error introducir elementos fantásticos en un relato ostensiblemente "realista"; pero el astuto libreto de Johnson transforma la fantasía en metáfora del trauma psicológico que inspiró el inquebrantable valor y perseverancia de Boudica para combatir un enemigo mejor preparado y con superior tecnología militar; y gracias a esa "ayuda divina", Boudica unificó a las tribus "bárbaras" (icenis, celtas, trinovantes, etc.) para levantarse contra la invasión.
Por el lado negativo, la producción de Boudica: Queen of War está al nivel de un episodio de Xena: Warrior Princess (apropiado, en vista de que Boudica sirvió como inspiración de aquella serie televisiva). No hay batallas masivas ni fastuosas vistas del Imperio Romano; solo mediocres trucos de "green screen" y ejércitos con cincuenta soldados en vez de diez mil; sin embargo, la energía de Kurylenko y la creatividad de Johnson para disimular presupuestos austeros nos ayudan a ignorar las fallas y enfocarnos en lo realmente importante: la transformación de una mujer fracturada en leyenda inmortal, y la catarsis de la victoria contra un enemigo invencible... al menos el tiempo suficiente para entrar a los libros de Historia.
Calificación: 8 (solo en el contexto de las B-Movies)

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Thursday, November 2, 2023

Cuando Acecha la Maldad


Síntomas: La posesión demoníaca de un individuo en una remota granja argentina causa graves problemas para los habitantes de la región.

Diagnóstico: Demián Rugna, director de la notable cinta Aterrados (2017), regresa con otra excepcional película de terror enfocada en las consecuencias humanas y psicológicas de la posesión satánica... aunque tampoco teme mostrar horribles escenas de sangre y violencia que "pegan" más fuerte por el estilo natural de la cinta. En resumen: otra obra maestra que funciona en todos los niveles imaginables, desde el impacto visceral de sus imágenes, hasta la resonancia del mensaje social.
Al principio de Cuando Acecha la Maldad, los hermanos Pedro (Ezequiel Rodríguez) y Jimi (Demián Salomón) encuentran un cadáver en los alrededores de su granja; y cuando indagan sobre su procedencia, descubren a una familia con un grotesco caso de posesión demoníaca... lo cual, según la tradición, tendrá funestas consecuencias para los habitantes de la región. ¿Podrán hacer algo para salvarse?
A diferencia de otras películas sobre posesión, Cuando Acecha la Maldad ofrece una ingeniosa alternativa de la receta clásica, con nuevas reglas que replantean la crisis en un contexto colectivo, simbolizando el peligro de una "epidemia" que propaga ideas nocivas entre los miembros de la comunidad.
Sin embargo, no hace falta analizar (o siquiera percibir) el subtexto político de Cuando Acecha la Maldad para disfrutarla como una contundente obra de terror, apoyada por excelentes actuaciones, y dirigida con la visión de un artista que no solo entiende el género, sino que se esfuerza por ampliar sus horizontes y relevancia cultural.
El desempeño del reparto es impecable, atrapándonos en la incertidumbre de la situación... ¿habrá realmente un hombre poseído en una remota granja de Argentina, o será simplemente una condición médica que no se atendió a tiempo? La reacción de las autoridades parece más racional, pero conocen las mismas leyendas... y hay detalles que nadie puede explicar.
Los aspectos técnicos son igualmente sobresalientes, desde la cinematografía de Mariano Suárez y la música de Pablo Fuu, hasta los tremendos efectos especiales de Marcos Berta. Todos contribuyen a la atmósfera de aislamiento y paranoia que nos contagia la desesperación de los personajes. Porque, en el fondo, Cuando Acecha la Maldad no es un relato convencional de posesión, sino un drama rural sobre culpa, responsabilidad, y las terribles decisiones que son necesarias para sobrevivir... o para conservar la esperanza. A veces es lo mismo.
Calificación: 9

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