Síntomas: En un edificio multifamiliar de Noruega, varios niños experimentan con sus poderes psíquicos sin darse cuenta del daño que pueden causar... o tal vez saben exactamente lo que están haciendo.
Diagnóstico: Pensé que The Innocents sería otra típica historia de "niños diabólicos"... y en cierto modo así fue, pero con influencias de muchos otros sub-géneros que le dan una identidad difícil de clasificar. Baste decir que la cinta noruega The Innocents es un thriller de alta calidad en todos los aspectos posibles, desde las actuaciones del joven elenco, hasta la meticulosa dirección de Eskil Vogt. En resumen, un moderno clásico del cine europeo. Por favor véanla antes de que Netflix haga un re-make en inglés con actores de sitcom.
Al igual que muchas películas de horror, The Innocents empieza con la llegada de una familia a su nuevo hogar; pero esta vez no es una remota casa de campo, sino un moderno edificio multifamiliar. El joven matrimonio (Ellen Dorrit Petersen y Morten Svartveit) tiene dos hijas: Anna (Alva Brynsmo Ramstad) sufre de autismo y requiere cuidados especiales; y aunque su hermana menor Ida (Rakel Lenora Fløttum) a veces la ayuda, también siente rencor por la atención que Anna acapara. Con el paso de los días Anna e Ida conocen a Ben (Sam Ashraf) y Aisha (Mina Yasmin Bremseth Asheim), cada uno con sus propios retos personales (Aisha tiene una condición dermatológica, y Ben podría ser víctima de abuso doméstico), y empieza a formarse una amistad que gradualmente revela poderes psíquicos latentes, haciendo muy interesantes sus juegos en el bosque cercano. Pero los niños no siempre miden las consecuencias de su "travesuras", y la situación amenaza con salirse de control.
No sé cómo describir el impresionante desempeño del elenco principal. Son sencillamente las mejores actuaciones infantiles que he visto en mi vida (sí, mejores que Haley Joel Osment en The Sixth Sense y Jacob Tremblay en Room, en mi humilde opinión), por la sencilla razón de que son actuaciones prácticamente mudas. La vida secreta de los niños no es verbal sino emocional; los diálogos tienden a ser simples y cortantes ("¿Qué están haciendo?" "Nada"), pero sus miradas expresan el conflicto intangible que crece conforme exploran los límites de sus habilidades. El mejor ejemplo es el extraordinario final donde aparentemente no pasa nada, y sin embargo nos deja devastados.
La dirección de Eskil Vogt (guionista de Thelma y The Worst Person in the World) presenta con perturbadora frialdad la "inocente" crueldad de los niños, demasiado jóvenes para comprender lo que están haciendo... hasta que las circunstancias los obligan a discernir la línea entre el bien y el mal. Los actores adultos son competentes (Ellen Dorrit Petersen y Morten Svartveit como los padres de Ida y Anna; Kadra Yusuf como la madre de Aisha; y Lisa Tønne como la madre de Ben), pero la película les pertenece a los niños... y el resultado es fenomenal. Solo advierto que The Innocents es una cinta lenta y pasiva, con esa austeridad europea que podría aburrir al público acostumbrado a los excesos de Hollywood. Pero en lo personal disfruté el metódico ritmo que acumula tensión con crispante paciencia, hasta explotar en una satisfactoria catarsis. Y, más importante, The Innocents me dio otra excelente excusa para mi lista de "Por qué no tengo hijos".
Calificación: 9.5 (sería 10, pero la escena del gato enfrió mi entusiasmo)
This comment has been removed by the author.
ReplyDeleteThis comment has been removed by the author.
ReplyDeleteThis comment has been removed by the author.
ReplyDeleteAh es que en esos comentarios te exhortaba a ver Chip y Dale, pero ya lo hiciste, así que gracias
ReplyDeleteGROSS GRIEF: No te preocupes! Gracias a ti por recomendarla, y feliz semana!
ReplyDelete