Thursday, January 10, 2019
Bad Times at the El Royale
Síntomas: En una fatídica noche de 1970, el hotel El Royale recibe varios huéspedes con secretos muy peligrosos que cambiarán las vidas de todos los involucrados.
Diagnóstico: Bajo la tutela de su mentor Joss Whedon (con quien trabajó en la serie Buffy The Vampire Slayer), Drew Goddard se convirtió en un talentoso director y guionista, cuyo trabajo hemos disfrutado en Cloverfield y The Martian (como escritor) y la genial The Cabin in the Woods (como director). Y ahora, en Bad Times at the El Royale, Goddard se da el lujo de crear su propio universo "neo-noir", fusionando ingredientes antiguos con una moderna sensibilidad que intenta subvertir los clichés de este género para construir algo nuevo y extremadamente ambicioso... quizás más ambicioso de lo que puede soportar la película.
La historia comienza con gran estilo y dinamismo: el viejo Hotel El Royale ha visto mejores épocas, pero aún conserva el esplendor de sus glorias pasadas (al menos en la superficie), así como un curioso "gimmick" que lo hace geográficamente especial, y ocasionalmente atractivo para cierto tipo de clientela. Entonces, durante una tormentosa noche, varios individuos con muy distinto temperamento (y cada uno con sus respectivos secretos) encontrarán en el hotel algo que no esperaban. Para algunos será la muerte; para otros, redención.
Entre esos individuos: Laramie Seymour Sullivan (Jon Hamm), extrovertido vendedor de aspiradoras que sabe más de lo que aparenta; el afable Padre Flynn (Jeff Bridges), tratando de ocultar los efectos de una grave enfermedad; Darlene Sweet (Cynthia Erivo), cantante de estudio con una pragmática actitud sobre su futuro en la industria musical; y Emily Summerspring (Dakota Johnson), rebelde "hippie" con poco respeto por las reglas. Y, como el recepcionista y único empleado del decrépito hotel, Miles Miller (Lewis Pullman) tratará de mantener el orden mientras lo persiguen sus propios vicios y remordimientos.
El libreto de Goddard dibuja personajes con enorme potencial para crear drama y conflicto durante sus impredecibles interacciones. Las historias individuales que los llevaron al Hotel El Royale se exploran gradualmente, revelando jugosos detalles que complican la trama y alteran constantemente la perspectiva de la cinta, hasta que no sabemos a quién creerle, o en quién confiar. Y así, replanteando situaciones y confundiendo nuestras expectativas, Bad Times at the El Royale parece dirigirse a una inevitable colisión de personalidades... pero termina desinflándose a la mitad del camino, pues nunca consigue integrar sus componentes en un relato uniforme.
Claro, eventualmente entra a escena un nuevo factor que intenta unir a los dispares protagonistas, pero se siente como un truco de última hora que no hubiera sido necesario si desde el principio existiera mayor cohesión entre las eclécticas sub-tramas... las cuales son indudablemente entretenidas por derecho propio, aunque debilitadas por la ausencia de ese indispensable elemento unificador.
Por el lado positivo... todo lo demás. Las actuaciones me parecieron excelentes (con una excepción), gracias a un elenco que combina figuras reconocidas (Jon Hamm, Jeff Bridges) con nuevos talentos de sólida presencia (Cynthia Erivo, Cailee Spaeny), así como nuevas facetas de actores (Chris Hemsworth, Dakota Johnson) acostumbrados a interpretar papeles muy diferentes.
Y, finalmente, la dirección de Goddard es tan energética como su libreto. Quizás la historia no "pega" correctamente, pero su manejo de cámara, actores y locaciones denota la seguridad y convicción de un cineasta maduro, con suficiente confianza para divertirse mientras organiza "flashbacks", múltiples puntos de vista, y (no podía faltar), grandes dosis de violencia cuando la trama lo requiere.
Todo lo cual resulta en una experiencia generalmente positiva, aunque empañada por numerosos remiendos para evitar que el proyecto se derrumbe bajo el peso de su auto-indulgencia. Aún así, siento que Drew Goddard se ganó el derecho de un capricho creativo como Bad Times at the El Royale, y me complace que nos haya invitado a la fiesta. Aunque esperaré mayor disciplina en sus siguientes películas; después de todo, ni siquiera un protegido de Joss Whedon puede salirse siempre con la suya.
Calificación: 8
IMDb
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Lo primero que se me ha venido a la mente es Identity; ya veremos.
ReplyDelete¿ya viste la sueca Border? Me parece que está escrita por la misma persona que escribió Let the right one in.
Buen fin de semana.
-Pikuy
Pikuy: ¡Es verdad! No recordaba Identity. Las historias son muy distintas, pero el entorno del motel misterioso es ciertamente similar. Aunque yo diría que los "twists" de Bad Times at the El Royale son ligeramente más lógicos ;-) En cuanto a Border, no había escuchado de ella. Estaré atento por si se estrena en VoD. Gracias recomendarla, y muchos saludos!
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