Sunday, April 21, 2019

The Wind



Síntomas: Lizzy Macklin (Caitlin Gerard) y su esposo Isaac (Ashley Zukerman) son auténticos pioneros en el Viejo Oeste, viviendo en una remota granja con un caballo, una cabra, y algunas gallinas. Entonces Isaac se ausenta unos días, y Lizzy empieza a sufrir una crisis nerviosa, quizás ocasionada por una reciente tragedia, o por una siniestra presencia que acecha en la pradera.

Diagnóstico: The Wind es un parsimonioso thriller "a fuego lento", cuya narrativa no lineal revela la historia de Lizzy, una valerosa mujer atormentada por un trauma que dejó profundas heridas emocionales, lo cual podría explicar sus alucinaciones y creciente paranoia. O también podría ser una tenebrosa historia de terror sobre espíritus malignos que viven en las praderas desde antes de que llegara el "hombre blanco" con sus nuevas religiones y falta de respeto por el entorno natural.
En distintos momentos de The Wind mi opinión variaba entre una y otra alternativa: ¿horror sobrenatural o "thriller psicológico"? Pero una y otra vez la directora Emma Tammi confundió mis expectativas con nueva evidencia y sorpresivas revelaciones que complican aún más el misterio, hasta conducir a un impactante final que me dejó satisfecho... aunque con una sombra de duda sobre lo que realmente ocurrió. Lo cual me pareció un gran acierto de la guionista Teresa Sutherland, quien evita comprometerse con un género específico, pero cumple con una fascinante historia que nos atrapa desde el principio, y nos envuelve en su crispante desarrollo.
Sin embargo, cualquiera que sea nuestra conclusión, The Wind funciona perfectamente como "western dark" que aprovecha el aislamiento de los personajes y el espíritu de la "nueva frontera" como parte integral del melodrama. Y la adición de temas religiosos ofrece reflexiones sobre el estricto dogma de aquella época, el cual podía utilizarse como herramienta de manipulación, o como cálido refugio cuando la vida se volvía demasiado cruel para enfrentarla sin apoyo espiritual.
Caitlin Gerard (Insidious: The Last Key) ofrece una extraordinaria actuación como Lizzy, atrapada entre sus responsabilidades diurnas y sus temores nocturnos. Ella es la primera en cuestionar la naturaleza de los inexplicables eventos que la rodean, lo cual hace sus conclusiones más convincentes para el espectador... aunque no para su esposo, interpretado por Ashley Zukerman con un adecuado balance de escepticismo y amor por Lizzy. La soledad de Lizzy se alivia temporalmente gracias a sus vecinos Emma (Julia Goldani Telles) y Gideon (Dylan McTee)... pero su granja está demasiado lejos para prestar ayuda cuando las cosas se complican (para cualquiera de las dos familias). Y Miles Anderson tiene una breve pero contundente participación como el Reverendo, cuyas buenas intenciones se vuelven en su contra.
Me gustó mucho The Wind, aunque su pausado estilo puede causar un poco de impaciencia. Y la fragmentada narrativa me confundió un poco con sus saltos entre pasado y presente; aunque, para ser justos, el director de fotografía nos ayuda con variaciones en la paleta de color para aclarar el flujo cronológico de la trama.
Pero lo que realmente destaca en The Wind (además de la actuación de Caitlin Gerard) es la dirección de Emma Tammi, utilizando astuta edición y atmósfera para explotar los temores universales de la soledad, la inseguridad, y la traición de nuestros principios. Así, con mínimos elementos, Tammi expresa grandes verdades e intensas emociones, sumergiéndonos en una crisis que podría ocurrir por igual en las planicies del Viejo Oeste o en el caos de la vida moderna. Aunque siempre es más interesante cuando hay lobos y cabras mezclados en la ecuación.
Calificación: 9

IMDb

No comments:

Post a Comment