Síntomas: La famosa escritora Alice Hughes (Meryl Streep) viaja a Inglaterra abordo del trasatlántico Queen Mary 2 con su sobrino Tyler (Lucas Hedges) y dos amigas que no había visto en muchos años. Y, naturalmente, durante la travesía se revelan antiguos secretos, surgen nuevas relaciones, y otras se extinguen.
Diagnóstico: La nueva "etapa experimental" del director Steven Soderbergh ha generado obras temáticamente distintas, pero similares en su forma, utilizando cámaras de bajo costo y diálogos semi-improvisados para re-capturar el espíritu independiente que le dio fama al principio de su carrera. Los resultados de estos experimentos pueden variar en calidad, pero siempre encuentro fascinante la conjunción de creatividad y tecnología que le permite a Soderbergh tomar riesgos que pocos cineastas del mismo calibre se atreverían a aceptar. Lo cual es una manera amable de decir que Let Them All Talk no me pareció una buena película, aunque sigo admirando los principios artísticos que la respaldan.
Let Them All Talk tiene un argumento simultáneamente denso y superficial, con múltiples sub-tramas y conflictos individuales que nunca se conectan satisfactoriamente. La escritora Alice Hughes (Meryl Streep) ganó un prestigioso premio literario, y quiere asistir a la ceremonia en Inglaterra, pero no le gusta volar. Entonces su nueva agente Karen (Gemma Chan) negocia un trato que le permite a Alice y varios invitados viajar a bordo del lujoso trasatlántico Queen Mary 2, a cambio de dar una conferencia durante la travesía. Alice invita a su sobrino Tyler (Lucas Hedge) como asistente de confianza, y a dos amigas de su época universitaria con las que quiere reconciliarse: Susan (Dianne Wiest), un ama de casa con algunos problemas familiares; y Roberta (Candice Bergen), vendedora de ropa interior con dificultades económicas. Y también las acompaña Karen con una "misión secreta" de la casa editorial que quiere distribuir el nuevo libro de Alice... siempre y cuando cumpla ciertas condiciones comerciales.
La premisa incluye abundante material para alimentar los vectores dramáticos que conectan a todos estos personajes (y a otros pasajeros que se involucran con el quinteto). El problema es que las conexiones tardan demasiado en concretarse, y los resultados son menos interesantes de lo que esperábamos. O al menos de lo que yo esperaba, considerando el increíble talento que Soderbergh reunió enfrente de la cámara.
Let Them All Talk es una progresión lógica del estilo casual y semi-improvisado que desarrolló el director en años recientes. El uso de cámaras pequeñas e iluminación ambiental le da la flexibilidad necesaria para capturar actuaciones muy naturales que se integran en un relato íntimo y espontáneo. Soderbergh usó ese proceso con gran éxito en el thriller Unsane, en la farsa financiera The Laundromat, y hasta en el drama deportivo High Flying Bird. Sin embargo, creo que Let Them All Talk (hasta ahora estoy entendiendo el doble sentido de ese título) refleja el lado oscuro de la técnica, pues ofrece tanta libertad que Soderbergh olvidó encontrar el punto focal de su narrativa.
No sé si Soderbergh exigió demasiada improvisación por parte de los actores (especialmente de los más jóvenes), o si le faltó objetividad durante la edición (creo que la cinta podría durar media hora menos sin tantos rodeos), o si fue su intención dejar la historia abierta e inconclusa porque, después de todo, así es la vida real. Los resentimientos del pasado y las crisis existenciales nunca tienen tres actos bien definidos, ni una perfecta resolución al final. Quizás por eso algunas personas aclamarán Let Them All Talk como un audaz manifiesto contra los excesos y artificialidad del sistema hollywoodense. Pero, en mi humilde opinión, fue un experimento fallido, aunque no exento de virtudes, que ayudará a refinar la técnica de Soderbergh y mejorar sus obras futuras. Al menos hasta que se aburra de la tecnología digital y adopte un nuevo capricho, como hacer cine con cámaras Polaroid, o algo así. Como sea, seguiré viendo sus experimentos porque, independientemente de sus fallas o aciertos, están impulsando el cine en direcciones inesperadas; y tal vez en esa innovación se esconde el futuro del medio.
Calificación: 6.5
Pablo, ¿Dónde has podido ver la película? La última de Soderbergh me decepcionó ligeramente, aunque no creo que haya sido un desastre. Acabo de ver una gran película, que descubrí en Netflix sin saber mucho de ella: “Lazzaro Felice”, una película italiana de 2018 ganadora en Cannes al mejor guión, que cuenta una fabula cargada de simbolismo y realismo mágico con un fuerte mensaje social, de una forma que me pareció muy original y cautivadora. El Protagonista, que fue su primera película, de forma excelente hace algo que pienso es muy difícil de conseguir en el cine, retratar la bondad en su más pura expresión. No se si ya la hayas visto, si es así ¿Que te ha parecido? Si aún no los has hecho, ¡mi más entusiasta recomendación! Saludos.
ReplyDeleteMmm sodenbergh? Para mi, lo mejor de el es lo que realizó a inicios de milenio: erin brokovich, Solaris, Traffic y oceans eleven... tuvo un acierto (inquietantemente profético por cierto) con Contagion.
ReplyDeleteFuera de ahí a sido bastante irregular.
Aparte de ser el creador del cliché del México en sepia en el cine estadounidense.
Pablo, ¿cuándo se podrá leer tu crítica de la excelente película taiwanesa A Sun, la cual, por cierto, está en Netflix? Saludos!
ReplyDeleteJorge Andrés: La vi por medio de mis suscripción a Dish Network que incluye el plan con HBO. Pero como HBO Max es exclusiva de "streaming", tuve que hacer un par de intentos con diferentes métodos para evadir el "geo-locking" (VPN y Unlocator), y eventualmente funcionó. Y muchas gracias por recomendar Lazzaro Felice; suena bien, y trataré de verla ahora que tenga un poco más de tiempo (¡espero!) Recibe un gran saludo, y Feliz Navidad!
ReplyDeleteDr. Arturo Pelayo: ¡Ja, ja! Es verdad; desde Traffic se volvió costumbre darle un tono sepia a las escenas de México. En el contexto de esa película fue una buena idea para diferenciar las distintas locaciones, pero por alguna razón se convirtió en un cliché visual. Dato curioso: en la "suite" de corrección de color que uso para mi trabajo (Magic Bullet Looks), ese filtro se llama "Mexicali" ;-) Un abrazo y Feliz Navidad!
Anónimo: No conocía esa película. Trataré de verla para escribir su crítica. Muchas gracias por la recomendación, y muchas felicidades!
Pablo, ¿finalmente no escribirás crítica de A Sun? Saludos!
ReplyDeleteAnónimo: La pestaña de A Sun sigue abierta en mi navegador, de modo que la recuerdo todos los días... pero siempre surgen estrenos que distraen mi atención. Voy a hacer lo posible por verla antes de que termine este mes. Muchas gracias por señalar mi retraso, y que tengas una excelente semana!
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