Saturday, October 17, 2015

En la Cuerda Floja (The Walk)



Síntomas: A mediados de los años setentas, el equilibrista francés Philippe Petit se obsesiona con las recién construidas Torres Gemelas de Nueva York, y decide realizar una caminata sobre un cable tendido entre ambos edificios. Entonces, con el apoyo de su novia Annie y de algunos cómplices tan audaces como él, viajan a Nueva York para realizar su sueño.

Diagnóstico: Mis expectativas por la cinta En la Cuerda Floja eran bastante bajas por tres razones. Primera: En general me gustan menos las películas "basadas en hechos reales" cuando ya vi algún documental sobre dichos eventos; en este caso fue el excelente documental Man on Wire, del año 2008. Segunda: Decidí ver la versión tridimensional de En la Cuerda Floja, lo cual casi nunca hago porque me desagrada la disminución de luminosidad y nitidez que acompaña el uso de los lentes polarizados; además, rara vez he sentido que el "efecto 3D" mejore una película. Y, tercera: En la Cuerda Floja fue dirigida por Robert Zemeckis, quien no ha producido una película realmente buena en lo que va de este siglo (sí, Flight no estuvo mal, pero solo si la comparamos con el terrible "período animado" del director).
Bueno, pues me complace decir que mis expectativas fueron totalmente erróneas en todos los casos. Para empezar, la experiencia en 3D fue casi perfecta y totalmente justificada para acentuar el vértigo de las grandes alturas (al parecer algunas personas lo han sufrido hasta el punto de tener que salirse del cine), y sin duda mejoró la experiencia... a pesar de los mencionados problemas de los lentes polarizados.
Pero eso es tan solo un adorno. Lo más importante es que la dramatización de los "hechos reales" escrita por Christopher Browne (basado en el libro "To Reach the Clouds", de Philippe Petit) no busca el frío realismo de una escueta narración de los hechos, sino que añade abundante personalidad e imaginación a la ya de por sí increíble hazaña de Petit, logrando una suerte de "heist movie" rebosante de humor, energía e inspiración. Por su parte, Robert Zemeckis parece haber encontrado un sano equilibrio (ja, ja) entre su obsesión con las producciones cien por ciento digitales y los requerimientos de una buena historia filmada en el estilo tradicional. Bueno, no muy tradicional... por razones obvias En la Cuerda Floja está repleta de efectos visuales (del relativamente joven estudio Atomic Fiction), y sospecho que el cien por ciento de las escenas incluye algún tipo de "green screen". Algunos de estos efectos son invisibles y otros intencionalmente obvios, resultando en una floritura visual de proporciones casi burtonianas (no sé si eso constituye un halago o un insulto); pero creo que este excéntrico estilo le sienta bien a un relato tan extraordinario que quizás parecería menos "real" si no estuviera contado con tanta creatividad.
La dirección de Zemeckis es fluida y vigorosa, encontrando siempre el ángulo de cámara o elegante composición para aumentar cada escena. Sin embargo no siempre tragué las intervenciones del redundante narrador que expresa lo obvio y describe lo que ya estamos viendo; pero de vez en cuando la omnipresente voz de "Petit" añade detalles reflexivos y semi-filosóficos que enriquecen considerablemente la narrativa, y validan la presencia de un instrumento dramático tan artificial y distractor.
Hablando de lo cual, Joseph Gordon-Levitt entrega otra de sus excepcionales actuaciones, transmitiendo sin dificultad alguna la locura y determinación de Philippe Petit, así como su motivación para emprender una misión tan descabellada... pero sin parecer un maniático desconectado de la realidad. Lo mejor que puedo decir es que Gordon-Levitt nos convence de que Petit es un artista; ahí comienza y termina todo lo que necesitamos saber del personaje.
El elenco secundario está integrado por actores franceses desconocidos (por mi) que se integran orgánicamente a la trama sin necesidad de excesivo desarrollo; en otras palabras, cuesta trabajo diferenciarlos, pero todos cumplen una función importante en el melodrama. El único "famoso" (además de Gordon-Levitt) es el gran Ben Kingsley como "Papa" Rudy, el mentor de Philippe que no solo le enseña los aspectos mecánicos del equilibrismo, sino que revela los más importantes secretos mentales sobre el arte de caminar en la cuerda floja. Es una actuación corta pero absolutamente trascendental para el espíritu de la película. Y, por el lado femenino, también destaca la actriz Charlotte Le Bon en el papel de Annie, no solo por parecer una joven (y aún más adorable) versión de Winona Ryder, sino por la madurez que expresa con la mirada; sospecho que pronto será capturada por Hollywood, como ocurrió con Alicia Vikander o Marion Cotillard.
En cuanto al "gran golpe" de Petit... sería imperdonable revelar más de la cuenta. Desde luego son hechos históricos, y bastarían quince minutos en Wikipedia para conocer todos los "spoilers" posibles, pero recomiendo no hacerlo. La aventura de Philippe Petit es extraordinaria en todos los sentidos, y Zemeckis aplica su magia cinematográfica para hacer justicia a la "realidad", al mismo tiempo que añade niveles de significado genuinamente conmovedores, desde su sincero homenaje a las Torres Gemelas, hasta su idílica visión de Nueva York en los años setentas, una ciudad casi ingenua en aquella época previa al terrorismo moderno.
Desde luego hay algunos ocasionales tropiezos En la Cuerda Floja (ja, ja); el principio es un poco difuso, y me costó trabajo tomar en serio el acento francés de Joseph Gordon-Levitt... por no mencionar la afectación de mostrarlo en la Estatua de la Libertad mientras narra la película entera. Pero aún con esas reservas salí del cine con una sonrisa, y puedo recomendar En la Cuerda Floja no solo como testimonio de un indescriptible triunfo del espíritu humano, sino como una fascinante película que (por primera vez) me gustó más que su versión documental. Después de todo, hay amplio lugar para la "realidad" en el cine, pero no debe convertirse en un obstáculo para el complejo proceso artístico de un francés loco, o un cineasta americano obsesionado con la tecnología. Esa es la cuerda floja que transita Zemeckis, y me da gusto que en esta ocasión no se haya caído.
Calificación: 9

IMDb

1 comment:

  1. Yo también creo que fue una película excelente, vi the Man on Wire, pero definitivamente me quedo con En la Cuerda Floja. Zemmeckis logra narrar la historia de una forma amena, la película mantiene un buen ritmo. La elección del elenco fue un acierto excelente y ni hablar de lo bien que están los efectos especiales. Muy buena crítica.

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