Saturday, April 23, 2016

¡Salve, César! (Hail, Caesar!)



Síntomas: Eddie Mannix (Josh Brolin), veterano productor de Capitol Pictures, enfrenta un sinfín de problemas y obstáculos durante la filmación de varias películas en la era dorada de Hollywood. Pero ninguno se compara con el secuestro de Baird Whitlock (George Clooney), su más grande estrella.

Diagnóstico: ¡Salve, César! es una maravilla de estilo, atmósfera y diseño de producción, evocando con asombroso detalle las contradicciones del Hollywood de los años cincuentas... glamour y romance en la pantalla; intriga y traición detrás de las cámaras. Y todo ello interpretado por un competente reparto que captura a la perfección el espíritu, vicios y valores de aquella época. Lamentablemente los Hermanos Coen trabajan de nuevo con un argumento obtuso y serpenteante que va de aquí para allá en vana búsqueda de humor, drama, o simple consistencia narrativa, lo cual se ha vuelto un problema recurrente en sus más recientes producciones (algunos ejemplos: Inside Llewyn Davis y A Serious Man).
Desde luego podríamos alegar que el caprichoso libreto refleja las caóticas e impredecibles circunstancias que el protagonista (un poderoso productor de Hollywood) enfrenta todos los días, obligándolo a pensar creativamente y echar mano de todos los recursos disponibles (ya sea una oportuna bofetada o un ramo de flores) para mantener en funcionamiento la complicada maquinaria de un estudio cinematográfico. Y, para explotar esa variedad de situaciones, ¡Salve, César! incluye recreaciones de escenas y números musicales propios del Hollywood antiguo, las cuales me parecieron fenomenales. Los Hermanos Coen se divierten con casi todos los géneros de antaño (aunque me hizo falta un poco de horror o ciencia ficción), incluyendo elaboradas coreografías acuáticas al estilo de Esther Williams; acrobáticas rutinas de baile en la mejor traducción de Gene Kelly (con amplias dosis del subtexto homoerótico que apenas se insinuaba en aquel entonces); una visita al rodaje de un  elegante melodrama romántico; el obligatorio western, cuya estrella principal está intentando transformarse en actor serio; y desde luego la épica romana que le da título a la cinta: "Hail, Ceasar!" es el nombre de la película dentro de la película donde trabaja el célebre Baird Whitlock (George Clooney) cuando es secuestrado. Para fans del cine clásico será un placer contemplar estas "escenas perdidas" de películas que nunca existieron, aunque podrían haber sido reales.
El problema, como dije, es que tantas digresiones (por agradables que sean) segmentan la premisa hasta el punto de la incoherencia. Esto nos deja con Eddie Mannix como el único propulsor del melodrama; y afortunadamente Josh Brolin rescata la situación con enorme energía e inquebrantable convicción, ofreciendo los escasos momentos emocionales que le dan sentido a la película entera. Eddie Mannix podrá ser una caricatura del típico productor hollywoodense, pero no deja de ser un personaje entero y realista, con las inevitables dudas y aspiraciones que moldean su comportamiento.
El resto del elenco muestra un desempeño inversamente proporcional a la fama de los actores. Con esto quiero decir que las grandes estrellas de ¡Salve, César! me parecieron el elemento más flojo de la película. George Clooney no es tan gracioso como piensa interpretando un general romano (¿habrá sido una meta-referencia al "peinado César" que usaba cuando se hizo famoso en ER?) Scarlett Johansson tiene apenas un par de escenas como la "inocente" estrella de cine con múltiples escándalos y un hijo ilegítimo en camino (otro de los problemas que Eddie debe resolver). Y Channing Tatum aparece únicamente para burlarse de su ruda imagen... bailando tap. Ninguna de estas sub-tramas me pareció satisfactoria o siquiera interesante.
Por el contrario, todos los actores "desconocidos" hicieron un fantástico trabajo en papeles pequeños pero rebosantes de carácter y entusiasmo, incluyendo a Alden Ehrenreich como el vaquero de impecables modales; Heather Goldenhersh como la fiel y sufrida secretaria de Eddie; y Max Baker como uno de los secuestradores de Whitlock, cuya motivación es al mismo tiempo trágica y graciosa (lástima que la reciente cinta Trumbo tocó temas similares de manera más inteligente y provocativa).
A fin de cuentas ¡Salve, César! no me pareció una mala película; pero tampoco es la comedia "alocada" que prometía la publicidad. La mediocre historia se compensa con las actuaciones, con la enorme calidad de la producción y, desde luego, con la virtuosa cinematografía de Roger Deakins (cuya rica paleta “Technicolor” rinde tributo a los procesos ópticos de los cincuentas). Podría recomendar ¡Salve, César! para fans del viejo Hollywood, siempre y cuando no esperen sustancia dramática, sino delicioso "eye candy" para inspirar cálidos sentimientos nostálgicos... y ya. En serio, los Hermanos Coen necesitan encontrar un colaborador que los rescate de su propia "visión creativa", cada vez más impenetrable con el paso de los años. O quizás ya me dejaron atrás, y no les "entiendo" como antes.
Calificación: 7.5

IMDb

2 comments:

  1. Pues si, todos están en lo correcto, los Coen orquestan una gran secuencia o musical homenaje una y otra vez (la de Scalett J. fue muy graciosa), pero hasta ahí, no hay historia o guion detrás de ello que nos cuenten y que nos interese, George Clooney se la pasa secuestrado y me imagino que ese es la trama principal, pero ningún personaje parece estar buscándolo, creí que esa sería la labor de Josh Brolin o Tilda Swinton, o debio serlo. Y los cameos del increíble elenco solo parece relleno para terminar la película.
    Preocupante que digas que es una tendencia negativa de los Coen Pablo, a mi si me gusto A serious man, creo que deben estar ya preparando su siguiente thriller noir que los volverá a poner en la cima.

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  2. Xtro: Es cierto; los Hermanos Coen ya necesitan otra película de alto perfil (como bien dices, un thriller noir... o quizás otro western) para recuperar credibilidad. Pero no sé si estén interesados en regresar a esos estilos de narrativa tan "convencional". Y respeto tu opinión sobre A Serious Man, pero yo la encontré tremendamente frustrante. Aunque después, cuando me enteré de las referencias bíblicas, tuvo un poco más sentido. Tal vez debería verla de nuevo con todo eso en la cabeza, para ver cómo cambia mi percepción. Muchas gracias por tu comentario, y feliz fin de semana!

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