Sunday, February 11, 2018
Victor Crowley
Síntomas: La joven Chloe (Katie Booth) quiere filmar una película sobre los asesinatos cometidos por Victor Crowley (Kane Hodder) hace diez años en los pantanos de Louisiana. Al mismo tiempo Andrew Yong (Parry Shen), el único sobreviviente de aquella masacre, viaja a los mismos pantanos para grabar una entrevista que aparecerá en un programa de televisión. Entonces, debido a un accidente, ambos equipos de producción quedan atrapados en el sitio donde todo ocurrió... y descubrirán que la leyenda de "Hatchet Face" es más real de lo que imaginaban.
Diagnóstico: En efecto, la original Hatchet ya tiene diez años, a lo largo de los cuales originó tres secuelas (contando esta última), e inspiró una nueva generación de cine slasher con los clásicos elementos del género, incluyendo efectos prácticos, "kills" sádicos y creativos, y un travieso sentido del humor para no tomar muy en serio la violencia.
De hecho, la nueva cinta Victor Crowley, pone tanto énfasis el humor que casi parece una "comedia de terror". Y si bien los chistes son bastante obvios y bobalicones, al menos consiguen arrancar un par de sonrisas, gracias a la simpatía de un reparto con plena consciencia de su situación: víctimas desechables en una "B-Movie" de bajo presupuesto diseñada para exprimir unos dólares más de la franquicia antes de que sea olvidada por las nuevas generaciones... o, peor aún, antes de que llegue el inevitable "reboot" que probablemente alguien ya está planeando.
Como sea, me da gusto que el director Adam Green haya regresado para la cuarta parte, pues bien podría ser el cierre de la saga... o un nuevo comienzo, según se interprete la escena adicional durante los créditos finales.
Otra pista sobre ese posible futuro es la atención que el libreto dedica a los aspectos sobrenaturales de Victor Crowley, los cuales francamente ya había olvidado. Y aunque me parecieron un poco innecesarios (sobre todo porque requieren una excusa muy forzada para repetir el hechizo voodoo que resucitó originalmente al asesino), supongo que ofrecen una razón válida para explicar los eventos de esta cinta. Claro que "válida" es un término muy relativo en este tipo de cine.
Y lo mismo aplica a las actuaciones, con el grado justo de exageración para complementar la incongruente mezcla de humor y terror, donde la misma escena puede provocar simultáneamente risas y repulsión (lo cual es algo positivo en el perverso universo de esta película). La gran estrella de Victor Crowley es sin duda Kane Hodder, repitiendo con gran gusto su interpretación del imponente asesino con la cara deformada. Aunque el rostro de Hodder queda oculto bajo el denso maquillaje, su lenguaje corporal sigue proyectando implacable propósito y agresión instantánea contra los despistados que se atreven a invadir su territorio. El resto del elenco es una diversa colección de víctimas potenciales que luchan desesperadamente por mantenerse con vida; mis favoritos fueron Dave Sheridan como el guía local con aspiraciones de actor; Krystal Joy Brown como la arrogante conductora del programa amarillista que quiere entrevistar a Yong; y Laura Ortiz como Rose, la astuta artista de efectos de maquillaje que asimila la situación mejor que los demás, no porque sea particularmente valiente, sino porque su cínico pragmatismo le permite evitar el pánico que siempre se transforma en malas decisiones ("¡Crowley no nos encontrará si corremos por el bosque!"). Ah, y también tenemos un cameo de Jonah Ray, para fans del nuevo MST3K.
Finalmente, el gore es grotesco y abundante, tal como me gusta; sin embargo su calidad artesanal se redujo desde la previa secuela, y en algunas escenas casi llega a niveles Tromáticos, lo cual no es necesariamente malo, aunque se siente como un paso atrás en una saga orgullosa de lucir las técnicas de antaño.
El tiempo dirá si Hatchet sigue prosperando como franquicia, o si Victor Crowley fue su último capítulo. Cualquiera que sea el caso, me pareció una divertida cinta recomendable para fans del cine slasher, gracias a muchos satisfactorios momentos sangrientos, adecuado humor, y sincero amor por este menospreciado género. En general me gustaron más las dos primeras películas, pero para ser una cuarta parte es sorprendente que Victor Crowley siga conservando el espíritu de la original.
Calificación: 7.5
IMDb
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Perdon por poner mi opinion antes de leer tu critica Pablo pero es que apenas la voy a leer en mi casa, saludos.
ReplyDeleteLa cinta comienza bien con el humor ramplón y las muertes, que aunque son sangrientas, los efectos se ven muy baratos.
Después con la presentación de los personajes insulsos tenemos el aderezo para el Body count, creo recordar que el que hace la firma de autógrafos murió en la primer cinta, el cual recuerdo era el peor pesonaje. Pero mas adelante se vuelve Tediosa, ni se cree uno que Green hiciera la cinta, las anteriores no le salieron tan mal, pero esta no se mueve del avión hasta los últimos minutos que dan algo de gore pero es muy poco, y es muy poco lo que se pueda recomendar la cinta, le doy ** ½ de *****
Vic: De acuerdo, la calidad general se redujo considerablemente, y no parece tener el mismo impacto de las cintas anteriores que dirigió Adam Green... pero a fin de cuentas me hizo reír, me gustaron los efectos "retro" sangrientos, y no me aburrió. Creo que fue un caso de diversión sobre calidad ;-) Muchos saludos y suerte!
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