Friday, December 4, 2015
En el Corazón del Mar (In the Heart of the Sea)
Síntomas: A mediados del siglo diecinueve el escritor norteamericano Herman Melville (Ben Whishaw) entrevista al anciano Sr. Nickerson (Brendan Gleeson), último sobreviviente del barco ballenero Essex, perdido en alta mar varias décadas atrás. Entonces Nickerson relata los pormenores de la última travesía del Essex, incluyendo los conflictos entre el Capitán Pollard (Benjamin Walker) y el Primer Oficial Chase (Chris Hemsworth)... así como el fatídico encuentro con una feroz ballena, que Melville eventualmente incorporaría a su más famoso libro: Harry Potter y la Ballena Blanca, o algo así.
Diagnóstico: Antes que nada, permítanme tranquilizar a los puristas de Melville: En el Corazón del Mar no tiene mucho que ver con la venerable novela Moby Dick. Sí, la película está oblicuamente relacionada con el origen de ese libro, pero está basada en OTRO libro ("In the Heart of the Sea: The Tragedy of the Whaleship Essex", de Nathaniel Philbrick), y no resultó ser una de esas "reimaginaciones literarias" como la reciente Victor Frankenstein o Alice in Wonderland, que era lo que yo temía. Habiendo dicho eso, tampoco me pareció una cinta particularmente buena, aunque sus sobresalientes valores de producción y accesible libreto ofrecen suficiente entretenimiento para no sentir que desperdiciamos dos horas viendo rudos fulanos matando ballenas.
Quizás exagero. Solo vemos a los tripulantes del Essex matar una ballena, y el director Ron Howard encuentra un buen balance entre el tono heroico de dicha "hazaña" y el remordimiento de una atrocidad tan grande contra el mundo natural (desde luego yo me opondría totalmente a tal actividad, pero estoy tratando de ser imparcial). Además, el punto de la cinta no es la cacería de escualos, sino la posterior venganza por parte de una enorme ballena, magníficamente creada por los magos de efectos especiales y "retratada" por el director de fotografía Anthony Dod Mantle, cuyas impresionantes vistas del océano poseen tal consistencia y naturalidad que dejé de preocuparme por cuáles serían reales y cuáles simuladas. En el Corazón del Mar se ve fantásticamente bien, y mucho más creíble que la obvia artificialidad de Life of Pi (mis disculpas para fans de aquella película; me gustaron muchas partes de la historia pero jamás logré tragar el exceso de "CGI" que satura sus escenas).
En fin, regresando a la película pertinente, En el Corazón del Mar acomoda los supuestos "hechos reales" en una fórmula perfectamente inocua y previsible, empezando por el protagonista, Owen Chase, interpretado por Chris Hemsworth como el clásico héroe cinematográfico, rudo pero sensible, y dividido entre su familia y las exigencias del difícil trabajo que debe realizar para mantenerla. Además, tiene el físico de Thor, así que no podría ser más heroico. Luego vienen los villanos corporativos, hambrientos (figurativamente) de aceite de ballena, para lo cual financian el viaje del Essex con un capitán novato al timón, cuando es obvio que nuestro héroe estaría mejor capacitado para guiar la peligrosa travesía. Y, bueno, para no revelar más de la cuenta, así procede En el Corazón del Mar, con pocas sorpresas, nulo suspenso y apenas un poco de drama durante la segunda mitad, cuando la historia toma un rumbo distinto (aunque no muy inesperado), dejando atrás la aventura para examinar los eventos que Nickerson (el anciano narrador) mantuvo en secreto durante varias décadas, hasta que la curiosidad y ferviente interés de Melville lo inspiraron a confesar la verdad. Parece que estoy revelando demasiado, pero no es así. De hecho, con excepción de un par de eventos, no hay mucho que revelar. Como dije, el libreto está firmemente basado en los estereotipos de Hollywood, y la dirección de Howard no hace mucho para distinguir la cinta en modo alguno, además de los antes mencionados logros técnicos.
Las actuaciones son igualmente adecuadas para interesarnos en los personajes, pero sin compenetrarnos demasiado con ellos. Apoyando a Hemsworth tenemos algunos sólidos actores de carácter como Benjamin Walker, Brendan Gleeson y Tom Holland, por no mencionar a Cillian Murphy en un papel tan superficial que apenas rebasa la categoría de "extra". Y de las mujeres mejor ni hablar... Charlotte Riley tiene dos minutos en pantalla como la sufrida esposa de Chase, y ahí terminó su labor (otra cinta que no pasa la "prueba Bechdel").
Ya mencioné el mejor atributo de En el Corazón del Mar: no fue una versión revisionista de Moby Dick. Como aventura marítima por derecho propio me pareció medianamente entretenida y olvidable. Como historia de "hombre contra la naturaleza" apenas despierta la menor tensión; necesitaba una catástrofe más grande, o un monstruo con más personalidad. En la primera categoría me gustó más Master and Commander (o, para el caso, la serie televisiva Black Sails); y en la segunda recomiendo Deep Rising o la original 20,000 Leagues Under the Sea. Y, finalmente, dentro de la filmografía de Ron Howard, prefiero Backdraft y Apollo 13. En el Corazón del Mar aspiraba a la emoción de la primera y el drama humano de la segunda, pero falló en su intento. En resumen, Howard acuarteló bien las velas con la escota a barlovento; sin embargo lo desarboló la floja narrativa y terminó fondeando en calma chicha.
Calificación: Picada a 7
IMDb
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¡Hola, Pablo! Mucho tiempo no he tenido de comentar, pero sigo 'lurkeando' en tu blog cada que puedo. Hace poco fui a ver la película y si bien sospecho que me gustó más que a ti (yo le daría un 8), comparto los mismos puntos que señalas.
ReplyDeleteDiría que me habría gustado más un ataque extendido contra el barco en vez del "stalkeo" contra los botes. Por un momento llegué a pensar que la ballena había pasado a ser una alucinación del personaje de Hemsworth, y que le daría un caso de Ahab-itis, pero no, era el bicho real. No tiene mucho sentido porque no salía a respirar en momento alguno (cosa que habría matado "la sorpresa"), pero igual me impresionó lo bien realizado del CG de la ballena (por cierto, a Eli Roth le dieron la dirección de la adaptación de "MEG", y ver los efectos de esta película le inspiró a realizar a su Megalodon de la misma forma. Me pregunto que locura hará el sr. Roth, no soy fan de su filmografía pero la saga de libros es divertida).
¡Un saludo cordial desde Chile! (donde estoy estudiando ahora. Extraño los tacos).
Gracias por la critica menos mal que aclaraste, si era o no era una versión moderna de Moby Dick, ya que la versión mas conocida tiene unos cuantos años de 1956 con Gregory Peck, tendré que esperar que llegue a las sala de cines de mi país para poder disfrutarla.
ReplyDeleteEl jinete de la perdición: Bienvenidos por igual el comentario y el "lurkeo" ;-) Y gracias por visitarnos desde Chile; ojalá tus estudios dejen tiempo para conocer y apreciar ese país. En cuanto a In the Heart of the Sea, también pensé que Chase sufriría los síntomas de Ahab, pero creo que eso excedía la limitada ambición del libreto. Sin duda hubiera sido más interesante con ese componente psicológico. Y gracias por ese dato sobre Eli Roth... pero lo creeré hasta el día que compre el boleto para Meg. Creo que llevan más de diez años tratando de filmar ese libro, y por una u otra razón no se ha logrado. ¿Quién sabe? Con suerte Roth será "el elegido". Muchos saludos y gracias por tu comentario!
ReplyDeletepaul crosnier: Sí, recuerdo la de Gregory Peck, pero más por los efectos especiales y el libreto adaptado por Ray Bradbury! Quizás el beneficio principal de In the Heart of the Sea es que ahora parecería redundante hacer un re-make formal de Moby Dick. Muchas gracias y feliz fin de semana!