Max Steel

Síntomas: El joven Max McGrath (Ben Winchell) y su madre Molly (Maria Bello) regresan a su ciudad natal; y mientras Max se adapta a su nuevo entorno, empieza a notar extrañas manifestaciones de energía que podrían estar relacionadas con el experimento secreto que mató a su padre.

Diagnóstico: Mi única referencia de Max Steel eran los estantes llenos de juguetes que ocasionalmente he visto en centros comerciales. Imaginaba que sería una especie de Kid Acero moderno (referencia solo relevante para viejos como yo); y creo que también tenía un programa de televisión, o algo así. En resumen: no sabía nada de este personaje. Y sin embargo tuve la impresiona de que ya había visto la película Max Steel, porque el argumento es un ridículo pastiche de clichés y escenas recicladas incontables veces en cine y televisión.
A pesar de contar con un mediano presupuesto y algunos atractivos conceptos visuales, no hay rastro alguno de originalidad, ingenio, ni el menor esfuerzo por hacer algo remotamente interesante con la premisa de Max Steel: un típico joven incomprendido que resulta ser "especial", y descubre su potencial con ayuda de una misteriosa entidad, mientras es perseguido por anónimos agentes de incierto origen. Max McGrath (¿no era el cantante de Sugar Ray?) es una pobre copia de Peter Parker, con todo y su novia incongruentemente atractiva (interpretada por Ana Villafañe); el robot extraterrestre Steel (voz de Josh Brener, más conocido como "Big Head") imita a cualquiera de los robots "chistosos" de Transformers, y el Dr. Miles Edwards (Andy García) es... cualquier villano corporativo que hayamos visto en cualquier cinta de acción.
¡Perdón! ¿Revelé accidentalmente quién es el malo de la película? Créanme, desde su primera escena queda claro que Edwards oculta algo (por no mencionar que es el ex-mejor amigo del padre de Max). Incluso antes de verlo en persona podemos adivinar que se trata del villano, gracias al elegante automóvil estacionado afuera de la modesta casa de Max y su madre. Cómo dije: ni el menor esfuerzo por hacer algo diferente.
Hace un momento mencioné a los Transformers de Hasbro. Max Steel pertenece a Mattel, el otro titán juguetero que claramente pretendía iniciar su propia franquicia de exitosas películas basadas en un popular personaje (obviamente creado por un comité mercadológico... sus enemigos se llaman "Ultralinks"). Sobra decir que fallaron de manera espectacularmente patética. Al menos Hasbro tuvo la decencia de hacer algo descabelladamente excesivo para capturar la atención del público juvenil.
¿Ven lo que está pasando? Max Steel es tan floja y mediocre que hasta estoy defendiendo a Michael Bay. Mejor me callo antes de hacer más ridículo, y me despido con esta advertencia: no hay razón alguna para ver Max Steel. Incluso dudo que los fanáticos de los juguetes encuentren algo redimible en esta insípida confección. Aunque, por otro lado, ¿cuántas oportunidades tendremos de ver a Andy García disfrazado de Power Ranger? Tal vez sí había algo original en Max Steel, después de todo.
Calificación: 5

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