Saturday, November 29, 2014
Los Juegos del Hambre 3: Sinsajo, Parte 1 (The Hunger Games: Mockingjay, Part 1)
Síntomas: Tras desafiar públicamente al Presidente Snow (Donald Sutherland), la joven Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence) se refugia en el complejo subterráneo del Distrito 13, y gradualmente empieza a aceptar su función como imagen pública de la rebelión. Pero no será fácil, pues su amigo Peeta Mellark (Josh Hutcherson) sigue cautivo en el Capitolio, y Katniss no está dispuesta a sacrificarlo en aras de la revolución.
Diagnóstico: Parecía cuestionable la división de un libro en dos películas cuando lo hicieron en la saga de Harry Potter, y no se diga en la serie de Twilight; pero en Los Juegos del Hambre representa un auténtico insulto para los fans, y una bofetada en la cara del público que deberá pagar doble por ver las consecuencias de los eventos iniciados por Los Juegos del Hambre 3: Sinsajo, Parte 1, Inciso 3, Párrafo 5.
Pero me estoy adelantando. Conviene aclarar nuevamente que no leí las exitosas novelas de Suzanne Collins, ni planeo leerlas. Y, si algo aprendí de las dos previas películas, es que fueron diseñadas como complemento audiovisual de los libros, y no como auténticas adaptaciones cinematográficas dirigidas a contar la historia en sus propios términos. Naturalmente ahora ocurre lo mismo con la tercera película, repleta de escenas superfluas y mal explicadas; y con una abundancia de personajes irrelevantes que quizás tenían propósito y profundidad en las novelas; pero en las cintas solo gastan tiempo y nublan la narrativa, ya de por sí forzada y pobremente estructurada.
Habiendo dicho eso, me sorprendió descubrir que no odié por completo Sinsajo; tampoco puedo decir que la disfruté, pero sin duda me pareció superior a sus dos blandas predecesoras. Desafortunadamente sus contados aciertos pierden potencia cuando comete el grave error de aburrir al espectador, desaprovechando el tenue impulso dramático que logró generar a lo largo de sus dos lentas horas de duración.
El manejo de Katniss Everdeen como títere propagandístico tiene bastante mérito, y hubiera enriquecido la simplista moralidad de la película con una exploración de sus beneficios y peligros; pero, como todo en el universo de Los Juegos del Hambre, la disyuntiva ética de Katniss se maneja con frustrante frivolidad, dando énfasis a los aspectos menos interesantes del evento, como la ropa que usará, y la inútil asesoría de la experta en relaciones públicas Effie Trinket (Elizabeth Banks, horriblemente desperdiciada como fallido "comic relief"). Las escenas que funcionan son las que generan auténtica emoción (no mucha, pero algo es algo), como la revelación del devastado Distrito 12, o el bombardeo aéreo que evoca los horrores de los bunkers durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo una y otra vez el libreto se distrae con boberías que sentí fuera de lugar en un relato sobre guerra civil e insurrección política. Otro ejemplo (¿spoilers?): la subrepticia difusión de videos donde Katniss denuncia las atrocidades del Presidente Snow tienen el supuesto propósito de unificar a los distritos en su lucha contra el Capitolio; desafortunadamente nunca vemos el efecto de esos videos (con excepción de un ataque aislado que tiene incómodos tintes terroristas), de modo que cuando la Presidenta Coin (Julieanne Moore) emite un potente discurso revolucionario, no sabemos exactamente a quién está dirigido... ¿funcionó la propaganda? ¿Consiguieron unificar a los restantes distritos? ¿O nos enteraremos hasta la siguiente película? Me recordó aquel irritante asunto de los "patrocinadores" en la primera película, los cuales se usaron como excusa para propiciar el romance entre Everdeen y Mellark... aunque jamás los vimos, ni confirmamos su relevancia, a pesar de ser tan "importantes".
Repito: quizás todo esto se explicó con lujo de detalle en los libros; pero no es excusa para dejar huecos tan grandes en los libretos de las películas (aunque definitivamente hay tiempo para examinar los sentimientos de personajes incidentales que ya había olvidado por completo).
Una vez más la redentora de Los Juegos del Hambre 3: Sinsajo, Parte 1, Epístola 2, Versículo 8 es Jennifer Lawrence, empleando su considerable talento para mantener la cinta por encima del nivel mínimo de tolerancia, apoyada por excelentes actores de carácter como Julianne Moore (probablemente lo mejor de la película), el recientemente fallecido Philip Seymour Hoffman y Jeffrey Wright como Q... perdón, "Beetee", encargado de gadgets y obligatorio techno-babble.
Asumo que la siguiente película será acción de principio a fin, con ocasionales pausas para acomodar el triángulo romántico, lucir más diseños de moda, y sufrir los funestos chistes de Effie; pero sigue pareciendo una división arbitraria, dictada por la ambición y no porque la historia lo requiriera. Quizás combinando esas futuras escenas de acción junto con las mejores partes dramáticas de Sinsajo se podría hacer una película bastante pasable. Lamentablemente triunfó el Capitolio de Hollywood, usando sus propias técnicas de propaganda y persuasión. Pero funcionaron, pues después de tanta espera terminaré pagando por ver la conclusión de Los Juegos del Hambre. Por eso no merecen el silbido del "sinsajo", sino la trompetilla del desprecio.
Calificación: 6
Trailer
¿Qué nota le das a 'En llamas'?
ReplyDeleteAnónimo: Intenté ver Catching Fire en televisión, pero no terminé de verla; me pareció increíblemente aburrida y confusa, y no sería justo asignarle calificación con información incompleta. Mis disculpas y feliz año nuevo!
ReplyDeleteY como entendiste esta tercera entrega sin haber visto entera la segunda?
ReplyDeleteUn saludo.
Anónimo: Creo que no es una narrativa tan complicada como para no entenderla solo por haberme saltado la última media hora de la cinta previa. O quizás me equivoco. Gracias por preguntar y muchos saludos!
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